En la actualidad, en nuestro país
se debate mucho el tema de la Ecología, se quiere crear en las
distintas capas del pueblo y muy en particular en los niños y
jóvenes un respeto por la naturaleza. A diario se proyectan numerosas
imágenes de televisión, donde los científicos pronostican
distintos tipos de desastres ecológicos a los que estamos expuestos,
entre los que se citan mas frecuentemente: los cambios climatológicos,
la desertificación, los cambios de patrones migratorios de animales
y la pérdida de la biodiversidad.
A todos los cubanos se nos ha enseñado que a lo largo del siglo
anterior y hasta el presente, la humanidad ha alcanzado un desarrollo
científico y tecnológico de proporciones gigantescas,
pero que este desarrollo se nos ha convertido en un enemigo, que amenaza
con acabar nuestra propia existencia, pues ataca fuertemente sobre el
medio ambiente.
Por los distintos medios se plantea y con sobradas razones, que los
países desarrollados, es decir las sociedades industrializadas
son las que mayor responsabilidad tienen en este fenómeno que
tiene un carácter global y en el cual todos somos afectados de
una manera u otra. En conclusión se quiere crear una aptitud
ambientalista entre todos, pero fundamentalmente en los niños
que son, al decir de nuestro Apóstol "la esperanza del mundo."
Ya que hemos mencionado a nuestro José Martí, debemos
destacar que él escribió sobre la naturaleza y su protección,
Cintio Vitier, reconocido estudioso de la obra martiana, al referirse
a José Martí escribe "Toda su obra, toda su filosofía
y toda su línea de acción revolucionaria parte de su concepción
de la naturaleza."
Pero paralelo al flujo de información que se recibe por los distintos
medios sobre la necesaria conservación del medio ambiente, observamos
junto a nuestros hijos el ambiente urbano que prima en nuestras ciudades,
el medio donde las personas tienen que desarrollar todas sus actividades
productivas y sociales, vemos distintos sitios en cualquiera de nuestras
ciudades convertidos en vertederos de desperdicios, calles intransitables
con innumerables baches, salideros de agua, ya sean potables o albañales,
árboles y áreas verdes sin su debida atención,
vehículos automotores contaminando el aire y en ciudades como
el caso de Pinar del Río, repletas de vehículos tirados
por caballos, todo esto es perjudicial para la salud y le hace más
difícil la vida a los moradores de estas ciudades debido a los
olores que producen estos descuidos sobre el ambiente urbano.
Estos hechos están en contradicción con los conceptos
de sociedad sana desde el punto de vista ambiental, cuyas principales
premisas son que todo ser humano tiene el derecho a condiciones y medio
ambiente dignos para realizar su trabajo y el derecho a vivir en un
ambiente ecológicamente sano.
Al parecer, se ha caído en una paradoja, y me pregunto cómo
es posible que se quiera educar a niños y jóvenes en el
amor a la naturaleza, en el amor por el medio ambiente y exista un descuido
tan grande por el medio urbano, cómo es posible que un niño
que observa cada día de su infantil vida, este desprecio por
el lugar donde obligatoriamente tiene que convivir el hombre, ser supremo
de la creación y se exija de él, ser un protector de la
naturaleza.