marzo-abril. año VI. No. 36. 2000


REFLEXIONES 

JUBILEO DE LA VIDA CONSAGRADA

  

 

PROFETISMO

EN LA VIDA RELIGIOSA

 

por Hna. Zenaida Coreia, m.i.c.

  

     

 

La Iglesia dedica el 2 de febrero a la Vida Consagrada, y en este año jubilar, las hermanas de las comunidades religiosas presentes en la diócesis de Pinar del Río (Hnas. Pasionistas, Hijas de la Caridad, las Mínimas, Hermanitas de Jesús, Misioneras de la Caridad, las Hnas. Misioneras de la Inmaculada Concepción, las Carmelitas del Sangrado Corazón de Jesús y Hnas. Escolapias) se reunieron para dedicar y vivir momentos de reflexión, de fiesta y de celebración.

Desde Pinar del Río, rumbo a La Habana para vivir el primer momento del encuentro, asistimos junto a los religiosos y religiosas de otras diócesis a la conferencia "Memoria viva del ‘juego pascual´ por Dolores Aleixandre, RSCJ. En su exposición y en los momentos de reflexión, la Hna. Dolores nos invita a habitar ese lugar de los deseos, ese lugar que conduce a la Fuente de donde converge todo. Después, ella nos propuso alentar la experiencia evangélica de la pérdida y la ganancia. Los consagrados–consagradas, llamados a vivir la alegría, enraízan en relaciones interpersonales, en vivencias de solidaridad y comunión, en la participación de la misión de Jesucristo.

Nuestra reflexión personal, comunitaria y al nivel de la CONCUR transcurre a lo largo de nuestra inserción eclesial y social; y esto para concretizar juntas un quehacer y un ser de vida religiosa que sea un impacto en medio del pueblo cubano.

Conmemoración, oración, ritos, gozo, alegría, diversión, placer, personas reunidas, son palabras relacionadas con el sustantivo fiesta. Así se caracterizó el segundo momento de nuestro encuentro jubilar llevándonos a crear y/o a afianzar los lazos del corazón entre nosotras. En ese compartir más allá de los principios y de las ideas nos "domesticamos" fuera del ámbito puramente intelectual y laboral y pasamos a mirar un poco más desde adentro las raíces culturales de la "Hermana una vez desconocida", a saborear el compartir de las hermanas, a gozar la presencia de cada una. Fue una mezcla de cuevas y mogotes, de cantares y cuentos, de experiencias de vida y silencio, de risas y carcajadas, de oración y de relación, de admiración mutua y descubrimiento; fue un tiempo de descanso y de preparación litúrgica. Aventura festejada tanto bajo el sol como bajo la lluvia.

Momento cumbre:

Pasamos de lo recreativo a la celebración eucarística. En la parroquia de Consolación del Sur, donde se conmemora la fiesta de nuestra Señora de Candelaria, las Hermanas de la diócesis celebraron el tercer momento del jubileo de la Vida Consagrada. Las Hermanas renovaron los votos de castidad, pobreza y obediencia delante de Monseñor José Siro, quien presidió la celebración eucarística, de los concelebrantes y de los feligreses. La homilía de Mons. Siro fue un homenaje a la vida consagrada. En este momento histórico donde se vive un clima de tensión dentro de la Iglesia, las palabras de Mons. Siro nos llegaron como una bendición. Las Hermanas, animadas por el amor gratuito del Padre y en comunión con el pueblo, osan abrazar a Dios frente al mundo.

¿Quiénes son esas mujeres congregadas, de diversas nacionalidades, de distintos carismas, perteneciendo a diferentes comunidades religiosas? ¿Locura o testimonio? Testimonio de hermandad, de solidaridad, de unión en la diversidad, de alegría en lo caótico; un signo de comunión en medio de tanta división. Una avanzada liberadora de esperanza, de fe, de amor palpitando en este pueblo.

¿Y por qué están aquí? ¿Para hacer qué?

El reflejo de una amistad profunda alimenta el cuestionamiento: "Está donde Dios te quiere y quédate allí. ¿Para hacer qué? No gran cosa; aún nada, sino sentarte a los pies del Señor. Porque lo más importante no es hacer sino ser. La única razón de la vida es dejarte transformar en templo del Señor. Sé hija de Dios, hermana de los hombres. Estás en este mundo para ser como Jesús: redimir, servir, amar a las personas, llevarlas al padre. Y esto, incluyendo a los pecadores. Alégrate entonces y regocíjate porque Dios te ama y ama a toda persona, los buenos y los malos.

 

Por la CONCUR de la diócesis de Pinar del Río.

 

  

VIDA EN UN CAMINAR

¿Qué vida es esta que brota como un manantial

y sigue cálida, persistente, abundante como una fuente?

Los ojos miran en ti, ven miseria y solidaridad

Los oídos se abren a ti, oyen incoherencias y verdades

El cuerpo descansa en ti, siente lejanía y proximidad

El corazón se depone en ti, siente inseguridad e intimidad

El espíritu desciende en ti, reconoce ideal y realidad

La corporalidad te acoge: Vida, Soplo, Dinamismo...

¡Tantas paradojas a integrar!

¡Tantos límites a acoger!

¡Tantas realidades a vivir!

¡Tanta vida a unificar!

¡Tanto humano a divinizar!

Y esta vida asienta

sobrepasando los conocimientos

y esta vida estalla la semilla

llevándola paso a paso hacia el fruto.

Y esta vida conoce lo inconocible

proclamando la eternidad.

Y esta vida abraza al hombre

manifestándole el Corazón.

Y esta vida emana de la fuente

saciando la sed, transformando a los hijos,

En el caminar de la Vida.