![]() |
septiembre-octubre.año3.No.15.1996 |
![]() |
NUESTRA HISTORIA |
EL ANTIGUO MERCADO DE ABASTOS Y CONSUMO. por Wilfredo Denies Valdés |
En la sesión celebrada por la Junta Municipal de Pinar del Río, con
fecha 18 de diciembre de 1 858, se dio cuenta de un expediente contentivo sobre la
construcción de la plaza del mercado en este pueblo, después de haberlo conocido y
aprobado el Gobernador Colonial el día 10 del propio mes y año. En el expediente se
hacía constar las condiciones y presupuestos de gastos, así como del remate de la
mencionada instalación, el cual se celebraría el día 22 de enero de 1859. Para la obra
en cuestión se destinó la cantidad de 16 000 pesos.
Tal como se había orientado por las autoridades oficiales del territorio, en la fecha señalada se procedió a la subasta de la obra de la plaza del mercado, presentándose a la misma Andrés Arch, Ramón Salazar y el pardo Antonio Benítez Romero (sic). El remate fue adjudicado a Benítez Romero por la cantidad de 15 745 pesos, que percibiría en tres partidas iguales: la primera al comienzo de la obra; la segunda, a mitad de la misma y la tercera a la terminación de la construcción. Asimismo, fue incluido en el expediente todo lo concerniente al completamiento del edificio, haciéndose constar además, que todos los techos se construyeran de azotea y sobre columnas, sin emplear horcones. A finales de 1859 fue inaugurado el Mercado de Abastos de Pinar del Río, situado en aquel entonces en la calle «de las Yagrumas» o «de la fuente» (hoy Antonio Rubio) precisamente en los terrenos donde actualmente se encuentra la pizería Terracina. Esta instalación contaba con 31 metros de frente y 33 metros de fondo, lindando por sus cuatro frentes con la vía pública. Este edificio estaba subdividido, en su frente, con 14 casillas, un patio central con un aljibe en el centro y que albergaba varias tiendas de víveres, carnicería, pescadería, tejidos, productos del agro y otras. Esta instalación brindó sus servicios a una población de 7 000 habitantes hasta el año 1923, en que fue clausurado por la Junta Municipal De Salubridad por la falta de higiene y mal estado de la edificación, de tipo colonial. No fue hasta el 31 de diciembre de 1930 en que el Ayuntamiento pinareño toma el acuerdo de proceder a la reconstrucción de la Plaza del Mercado, para lo cual destinó 12 000 pesos que fueron consignados en el presupuesto correspondiente. De la reunión efectuada en la fecha señalada recogemos textualmente: «el antiguo edificio conocido como Plaza del Mercado es una construcción que actualmente se haya en estado ruinoso, con excepción de las paredes de carga». En la reforma se comprende también la ampliación, ya que el crecimiento constante de la ciudad obliga a ponerle mayor número de locales, además de dos establecimientos que aparecen en el plano en las dos esquinas del frente. Figuran plasmados, además, en el plano 24 casillas en todo el cuadro, y en el centro del patio, otras seis casillas. El 20 de enero de 1931, se celebró la subasta de las obras de reconstrucción de la Plaza del Mercado, la que fue adjudicada al ingeniero Amadeo López Castro, por la suma de 46 445.50 pesos, y una hipoteca del 8% de interés. A finales del año 1931, quedó abierto al público el Mercado de Abastos y Consumo. Las obras se llevaron a cabo utilizando el desplazamiento del antiguo local que allí mismo existía desde el año 1 859. El mercado de Abastos y Consumo era una de las edificaciones más sólidas de Pinar del Río, por su construcción y belleza arquitectónica, para una población de 1 9 000 habitantes. Y continuando con los antecedentes históricos de esta edificación, apuntamos que en la sesión celebrada por la Cámara Municipal de Pinar del Río el 18 de febrero de 1957, se recoge textualmente: «hace aproximadamente 30 años, quedó abierto al público el actual mercado de abastos y consumo de esta ciudad... (...) El actual mercado constituye, sin duda alguna, un deplorable espectáculo por tanta aglomeración de comercios que impiden el tránsito del público». Ya la ciudad contaba con 47 000 habitantes. En otra reunión efectuada por el Ayuntamiento se toma el acuerdo de proceder a la demolición del local. El 31 de mayo del propio año 1957, el Consistorio discute el Proyecto para la construcción y explotación de un nuevo Mercado, presentado por la Compañía Operadora de Acueductos y Mercados Públicos, sociedad anónima con el apoyo de Financiera Nacional y bajo la dirección técnica de la firma de ingenieros Albarrán-Bibal, SA. El futuro Mercado de Pinar del Río, que sustituiría al viejo mercado, contaría con un edificio de tres plantas que brindaría todas las comodidades, supliendo la falta de espacio que hacen que se aglomeren mercancías y comercios. (Ver maqueta). El costo de la obra ascendía a 438 000 pesos. El Proyecto fue firmado por el representante de la compañía Roberto D. Guardiola Rodríguez y el Alcalde Municipal Francisco Sánchez González. Mientras tanto, la obra que se construiría en el mismo lugar, no había comenzado. Esta situación se agrava aún más al producirse el siniestro fuego de la manzana conocida por «los Delgado» o «de Sánchez», entre los días 25 y 26 de febrero de 1959 (hoy parque Roberto Amarán). La Revolución había triunfado, y con el fin de aliviar la desesperante situación de comerciantes y consumidores que se albergaban en ambas instalaciones desaparecidas, construyó en los terrenos donde actualmente se encuentra el Parque de Diversiones «Paquito González» en la loma del cuartel, unas casetas hasta la terminación del Mercado de Abastos que se construía en las calles Colón, Adela Azcuy y Delicias, dotado de todas las instalaciones para este tipo de giro comercial, tales como establecimientos del agro, carnicerías, pescaderías, farmacias, tejidos y otros comercios no menos importantes. El mercado se terminó en el año 1 962, para darle este tipo de servicio a la ciudad capital de Pinar del Río. Sin comentarios. |